El verlas disfrutar tanto de algo tan simple, me animó a hacerlas, y la verdad es que tuvieron bastante éxito entre los afortunados a probarlas, incluyéndome a mi!!
Así que este post tiene que ir dedicado a las grandes adoradoras de croquetas: Toñi y Carmen, las cuales nos hicieron contribuir bastante a la caja del Medina (chicas, ya sabéis a que me refiero!;)
INGREDIENTES:
- 75 gr de mantequilla
- 1L de leche
- 130 gr de harina
- 180 gr de jamón
- 150 ml de caldo de carne
- 2 huevos duros
- Sal, pimienta y nuez moscada
- Harina, huevo y pan rallado para el rebozado
Ponemos en una olla la mantequilla y mareamos en ella el jamón troceado. A continuación añadimos la harina y mezclamos hasta que esté dorada.
Este es el momento de echar la leche templada poco a poco sin dejar de remover
Aquí es donde se dice que está el secreto de una buena masa: cambiamos la pala por unas varillas y no dejamos de mover durante un tiempo, unos 6 minutos. Transcurrido ese tiempo estará lo suficientemente espesa, así que lo pasamos a un recipiente y untamos con mantequilla la superficie para que no se seque.
Dejamos reposar la masa, a ser posible de un día para otro, y ya podemos empezar a hacer croquetas. Lo más sencillo es volcar la masa sobre una tabla y cortar tiras, que trocearemos según el tamaño que queramos para las croquetas.
Pasamos cada croqueta por harina, huevo y pan rallado y las freímos cuando el aceite esté bien caliente (no echar muchas de golpe porque se pueden pegar).
Espero que os animéis a probarlas, pues salen un montón y se pueden congelar y sacarte de un apuro en caso de visita sorpresa!!